Las carretillas elevadoras son una parte natural del manejo diario de materiales. Son tan comunes que es fácil creer que siempre han estado ahí, pero sorprendentemente, la carretilla elevadora es una innovación bastante reciente …
Innovación para ahorrar tiempo y esfuerzo
Hace un siglo, el ferrocarril era el método predominante de transporte de larga distancia por tierra. Las estaciones de tren eran centros naturales para descargar y redistribuir equipajes, barriles y sacos, que a su vez eran transportados a vagones de equipaje de cuatro ruedas accionados manualmente. No es de extrañar que fue una gran innovación cuando un funcionario del ferrocarril de Pensilvania en 1906 tuvo la idea de agregar energía de batería a un vagón. ¡De repente apareció un camión con plataforma motorizada! Hizo que el manejo de materiales fuera más rápido y más conveniente, pero aún así no hubo montacargas …
Desarrollo edificante
El levantamiento manual de objetos pesados siempre ha sido tedioso e ineficaz, por lo que la idea de un ascensor portátil probablemente sea muy antigua, pero el primero registrado en la oficina de patentes es de 1867. Era una construcción de madera con montantes, una plataforma en voladizo y un montacargas. . Quizás se adelantó a su tiempo, porque no hubo éxito comercial para el ascensor de madera.
Sin embargo, unas cuatro décadas después, el mercado estaba listo, y ahora hizo su entrada el camión capaz de moverse tanto horizontal como verticalmente. A principios de la década de 1910, las carretillas elevadoras de acero allanaron el camino para el manejo racional de cargas unitarias. Comenzó en las fábricas de papel y los beneficios de los camiones se hicieron evidentes, por lo que el uso se extendió a otras industrias. Esta fue una época pionera para numerosas empresas que se dedicaron a la fabricación de equipos. En esta era, se hicieron muchas mejoras, y en la década de 1930 las carretillas se mejoraron con características como horquillas, distancias entre ejes más cortas, mástiles inclinables y construcciones soldadas, básicamente similares a las carretillas elevadoras de hoy .
Del lujo a la necesidad
A estas alturas, la carretilla elevadora era una herramienta conocida para el manejo de materiales, pero no era muy común. Una carretilla elevadora todavía se consideraba un lujo y, en consecuencia, todavía eran bastante raras. Se necesitaría una guerra para cambiar eso …
Durante la Segunda Guerra Mundial, la necesidad de almacenar, manipular y enviar artículos y suministros militares alcanzó niveles nunca antes vistos. Se tuvo que manipular una inmensa cantidad de mercancías en poco tiempo. La solución fue paletizar mercancías y utilizar carretillas elevadoras. En consecuencia, se necesitaba una verdadera producción en masa de carretillas elevadoras para satisfacer la demanda.
Cuando terminó la guerra, la carretilla elevadora había demostrado no ser un lujo, sino una herramienta fundamental para el manejo racional de materiales, una posición que mantiene en la actualidad.